El octavo barrio de San Luis Potosí guarda entre sus calles y habitantes una tradición culinaria en el que se retoman platillos típicos del estado y del barrio como las tostadas borrachas
Platillos típicos de SLP en El Saucito
La gastronomía de San Luis Potosí es variada dependiendo del cuadrante de la ciudad, por lo que en el Saucito, cerca de la Parroquia del Señor de Burgos o de El Saucito, se conjuntan diversos antojitos y platillos gastronómicos característicos del barrio y de todo el municipio.
- Tostadas Borrachas: La tostada borracha es la comida más reconocida y tradicional del barrio de El Saucito, pues hace más de 30 años se comenzaron a preparar y a comercializar en las inmediaciones de la plazoleta de la entonces colonia. Las tostadas se acompañan con salsa roja, frijoles, nopales, cebolla, queso y cilantro, sobre una tortilla de maíz tostada de gran tamaño, que le da el toque crujiente a este antojito saludable y económico, que disfrutan chicos y grandes.
- Gorditas de Horno: Aunque son un platillo que nació y se desarrolló en Mexquitic de Carmona, en la actualidad las personas que los elaboran comercian estas gorditas de maíz en la plazoleta y puntos especiales de El Saucito, como en las inmediaciones del panteón, por la alta demanda de los clientes. En un canasto hombres y mujeres, ofertan gorditas de masa con pulque natural, cocinadas en hornos de barro y leña, las cuales pueden ser saladas pues están rellenas con guisos como chicharrón, carnitas, rajas, queso, frijoles, pollo, deshebrada o dulces, dependiendo del paladar de cada persona. Estas gorditas se mojan en salsa, por lo que se suelen servir en bolsitas de plástico para la comida al comerlas.
- Pulque: Se ha convertido en la bebida tradicional de San Luis Potosí, y es en El Saucito en donde los amantes de esta bebida de los dioses suelen ir a consumirlo, cerca de la plaza principal, hace muchos años existían diversas pulquerías que ofrecían pulque natural y curados, la venta de esta bebida del aguamiel fermentado, se volvió popular y se convirtió en un símbolo gastronómico del barrio.
